Donde se funden la pasión por las imágenes bellas con el desorden de mis, tus letras...

viernes, 31 de diciembre de 2021

En cada instante de esa hora...

El reloj, avanza lento, aunque los días pasen rápido... Ese tic, tac, que suena en el silencio de las noches, de los amaneceres... Ese que suena siempre aunque esta noche, no podamos escucharlo... No lo haremos porque el bullicio de la gente, de la noche, de las sonrisas, de los brindis... No nos dejará... Tú, deseo que a toda esa melodía, sumes las olas, el mar, la orilla... Sumes su aroma, el color de los amaneceres, las gotas de mar sobre la piel, cuando andes a su vera o cuando atrevida, te sumerjas... 

El reloj, avanza lento, despacio, camino de esa hora... Esa en la que  tras verte celebrar, esperas conmigo... Esa hora en la que el tiempo, se detiene en nuestra piel, nuestras pieles se entregan a sentir, a latir, a suspirar, a susurrar... Esa hora en la que mis yemas, desean apartar tu ropa, desnudarte la piel hasta descubrir, tu lencería... Recorrerte despacio, mimoso, lento... Sentir como tu piel y tus poros, laten, se alteran, sienten, me sienten... Tus mejillas, tus labios, tu cuello... Tus hombros, tus clavículas, tus brazos... Tus preciosos senos, sensuales, generosos... Tus delicados pezones que los coronan, que despiertan deseosos de mi, o al menos, así, los deseo yo... Tu vientre, tus caderas, tus nalgas... Tu pubis, tu sexo, tu clítoris... Tus muslos, tus piernas, tus pies... Toda tú, deseo vibre en mi durante esa hora... Una hora si tiempo pero con ganas, con infinitas ganas de ti... Eternas ganas que fluyen por mi piel, mis yemas, mis labios, mi sed... Esa sed de ti que desea besarte, lamerte, morderte, recorrerte... Que desea beberte... Beberte despacio, beberte sin tiempo... Beberte hasta sentirte desfallecer, deshacer en mil suspiros... Suplicar más, o suplicar que me detenga... 

El reloj, detenido en esta nuestra hora, nuestro tiempo... Nos deja sentirnos... Desearnos... Amarnos... Amarnos y follarnos mientras el mundo celebra y nosotros, celebramos desnudos lo que nuestras pieles y nuestro deseo... Desee... Y así, a tu espalda desnudo, disfrutando del placer de tu piel, del placer que es tu piel en mi, de lo hermosa y sensual que es tu piel en mi... Mi sexo, desea rozarte de ese modo, recorrerte, ascender y descender, mojarse de ti, de esas gotas que seguiría bebiendo pero que ahora, me mojan... Y así, cuando quizás el reflejo de nuestras pieles ilustra ese instante, y en él se posan tus ojos tu mirada que me mira mientras te miro... Deseo sentir la danza de tu piel, de tus caderas, de tu cuerpo que de un leve movimiento, se sienta invadir de mi... Y yo, me sienta invadirte, resbalarte, llenarte, poseerte así... Y así, detenidos, permanecer unos instantes sintiendo, sintiéndote, sintiendo el modo en el que me sientes... Unos instantes antes de comenzar esa lenta danza, esa poco profunda que hará que me sientas donde más deseas, donde más te provoca, donde más sensible eres y donde ya, no podremos contener más tiempo las ganas de sentirnos, de pronunciarnos entre suspiros, de fundirnos en ese eterno placer que cada noche de estas... Y todas las demás... Te deseo... 

Y tú, arrodillada y erguida, sobre mi pecho, entre mis brazos, mis manos, mis yemas que te recorren sudada, te contienen la piel brillante,  conmigo aún dentro de ti... Suspirando... Latiendo... Sientes mi voz rasgada, susurrar frente a esa terraza desde donde se ve el mar... Un suave Te deseo... 
Feliz Año Nuevo...