He parado a comprar antes... Unas botellas de vino, un par de copas, comida para estos dos días, fruta, queso, pan... Aparco el coche en la calle, frente a la casa. Las llaves están en el buzón, o eso me ha dicho el propietario. Aquí, nada ocurre y todo puede quedar abierto, al alcance de todos... Entro y me acomodo, dejo mi mochila junto a la cama, luego las bolsas en la cocina... Antes de ordenar, me asomo por la ventana. Es un lugar tranquilo, pequeño... Pero para mi, lo más bonito de él, es que llegues tú...
Cuando todo está en su lugar, me desnudo para tomar una ducha... Mientras lo hago, tomo alguna foto... Imágenes de esas con las que deseo alterar tu piel a la vez que el deseo enciende la mía... Con la toalla enrollada a mi cintura, me asomo entre las cortinas y escucho acercarse un coche, quizás el tuyo... Me siento sobre el sofá, con la piel aún húmeda y el pelo mojado... Tomo mi móvil para escribirte... Te saludo como si nada pasara, te beso... Y mientras te cuento, envío mi localización... Deseo que me sepas, que me sepas cerca... Mis yemas, escriben la dirección... Calle Mayor nº...
Pasa el tiempo y yo, te imagino ya cerca, en ese mismo pueble... Será un fin de semana de sonrisas, de charlas, de paseo... De comer y beber... De pasarlo bien... Yo, travieso, me he arriesgado a venir, a proponerte este juego de deseo, de piel, de pieles que se desean enredar, que se desean susurrar, que se desean hacer el amor...
"Hola Gdm... Guapa... Hoy me he atrevido a venir hasta a ti, hasta este rincón a verte... A sentirte cerca, a sentirme cerca de ti... Deseo me sepas a pocos metros de ti, despertar en ti y en tu piel el travieso deseo de venir a mi, a rozarme, a besarme y dejarte besar... Entregarte a esa sed de ti que tengo y no cesa, a ese deseo de hacerte el amor lento, aunque no tengamos tiempo... Despacio, aunque el deseo nos pueda... Estaré aquí, esperando... Hay una llave en ese buzón. Solo tienes que entrar y perderte en mi... Da igual la hora... Ahora, al anochecer, en mitad de la noche, al amanecer... Una vez o varias, unos minutos u horas... Yo, he venido aquí solo por ti, para ti... A detener el tiempo en tu piel... A sentirte suspirar en mi, entre mis yemas y mis brazos, danzando sobre mi cuerpo desnudo... Ven... Te deseo... Te deseo alterada y nerviosa... Deseosa de mi como yo lo estoy de ti... Ven... No tardes... Mi piel, no puede esperar más... "