Amanece otro día, otro en el que habitas ese hotel, esas sábanas... Amanece otro día tras unas pocas horas de sueño, de descanso... El trabajo pesa, las horas se suman, pero te pones en marcha... Positiva... Fuerte...
Las horas pasan, el día avanza y apenas unas letras nos permiten rozarnos, la piel, los labios... La hora de comer te lleva a la de cenar entre charlas de trabajo... En medio, un efímero descanso en esa habitación, silenciosa, solitaria...
La noche, adornada por esa luna, todo lo inunda... Cansada, agotada, introduces la tarjeta dejando que esa pequeña luz verde te indique cuando abrir... Algo llama tu atención. Hay luz en tu habitación cuando debería ser oscuridad...
Semi desnudo, sobre las sábanas que desprenden tu aroma, me ves... Me sonríes... Me observas... Mi mirada te recorre a medida que traspasas la puerta, que dejas caer la puerta, que se cierra... A medida que tus pasos te traen al borde de la cama...
Mis brazos... Te envuelven, te atraen, te pegan a mi piel a la vez que mis labios te rozan, la mejilla primero, el cuello bajo el pelo, después... Mis yemas como mis labios te pasean la piel, la ropa, a la vez que aprenden tus formas...
Te desnudo despacio... Desenvolviendo tu piel, bonita, sensual... Te recorro lento, besando, probando cada poro entre susurros... Descubro la lencería que hoy te adorna, la que me gusta, me encanta...
Desnuda... En medio de esa habitación... Nos hacemos el amor... En medio de la noche, de sus minutos, de sus horas...
Desnuda... En medio de esa habitación... Líquida me perteneces... Sensual, me lates entre las yemas, entre los labios, sobre la piel... Hasta fundidos derramarnos entre susurros de placer... Del placer, que Te Deseo...
El día, termina... Tu piel, me brilla, me sabe salada, cálida, abrigada en mi... Te abrazo, me abrazo a ti hasta que te siento dormir, descansar suave, lente, relajada en mi... Hasta el amanecer...
Te deseo... En mi...