Hay abrazos... Y luego, estás tú...

Hay abrazos que son, eternos. Que siempre están, que llegaron un día para quedarse, para abrigar, para envolver, para sostener... Hay abrazos que se hacen piel y terminan por formar parte de tu piel... Que te visten siempre, cada instante, desde que amanece hasta que anochece y de nuevo amanece(s)... En mi... Y en medio de ese abrazo que eres tú, surgió la caricia, el beso, el deseo... El sentimiento que ya era y se hizo más... Más profundo, más intenso, más... Más... Tanto que ya nada podía ser sin ti... Tanto que ya nada puede ser sin ti... Tanto que ya nada podrá ser sin ti, en mi... De una manera u otra... En un lugar u otro... Ya nada es, sin ti... Porque contigo es como yo soy, porque en ti es donde deseo ser... Y sin ti, No... No sé...

Hay abrazos pero Tú... Eres el mío... Y cuando ten encontré, supe que serías eterna...

Recuerdos...

Entre tu piel y mis yemas...
Entre tu calor y mi deseo...
Entre tu deseo y mi calor...
Entre tu placer y mi susurro...

Entre tu piel y la mía...
Lenta caricia...
Líquida en mi...
Me lates...
Latiendo...

Recuerdos...

Caricia... Lenta...
Sobre tu piel denuda...
Sobre tu piel despierta...
Sobre tu piel... Encendida...

Caricia... Lenta...
Sobre tu piel resbala...
Sobre tu piel pasea...
Sobre tu piel... Provocada...

Pellizco... Suave...
Sobre tu pezón dormido...
En torno a tu pezón, que crece...
Atrapado... Endurecido...

Susurro... Entre caricias...
Hasta sentirte... Latir...
Hasta hacerte... Derramar...
Líquida entre mis yemas...

Te deseo... Poseer...
Te deseo... Contenter...
Te deseo... Siempre...