En medio de esas mañanas en las que mi piel arde en tu piel, en las que deseo tu piel arder en mi... En medio de ellas, te deseo traviesa en mi... Te deseo, dueña de mi piel, de mi deseo, de mi placer que deseo sea tu placer...
Deseo llegues a mi traviesa, desnuda, envuelta apenas en esa lencería que te viste sensual, esa que escogimos al amanecer y que sé te adorna desde entonces... Deseo sentirte controlar, todo... Controlar mi piel y mi latido... A tu antojo... A tu deseo... Mientras el mío crece y te besa, te intenta besar, tener, poseer...
Deseo tu deseo desbordado, tu piel encendida... Deseo te muevas sobre mi, consciente de mis manos, atadas... Deseo tu piel latiendo sobre mis labios... Líquida mojando mi rostro... Mientras mis manos quizás intentan liberarse...
Deseo tu placer, tus primeros orgasmos sobre mi... Tus suspiros con mi nombre entre ellos inundando la habitación... Deseo te expongas a mi, te entregues a mi sed... Deseo beber de tus orgasmos... Saborear de ti cada gota que desees entregarme...
Mi sed de ti no tiene límite... Apenas se calma entre tus muslos... Perdida en tu rosado sexo, líquido y brillante... Mi deseo, endurecido, desnudo, crecido expuesto a ti... Desea ser tomado por ti, rodeado por tus yemas, recorrido de ese modo que conoces mientras siento tu aliento, tu sed, tu placer...
Deseo tu deseo, de tenerme, de sentirme, de sentirte llenar de mi... Deseo el peso de tu cuerpo desnudo sobre el mío... Te deseo en mi...
Deseo sentir el modo en que tu piel danza mi piel... El modo en el que mi sexo resbala dentro de ti, te llena de mi... Deseo tu piel traviesa, alterada, entregada a sentir, a hacerme sentir... Danzar despacio, profundo a veces, corto a otras... Al ritmo de tus suspiros, de los míos... Porque en ti, no puedo contener...
Porque en ti no deseo contener... Y en ti deseo descubrir mi límite... Ese que me hace deshacer y endurecer... Ese que te deja sentirme tenso en tu interior... Contraer mis músculos para hacerte sentir esa presión, ese movimiento que conoces y sé deseas...
Sobre mi piel te deseo Diosa... Dueña de ese instante... Amante de mi piel y de mi alma... Animal sensual y sexual que sobre mi se descontrola... Se entrega sin límite a sentir, a sentir placer, a hacer sentir placer... Todo ese placer que yo, te deseo, que yo deseo...
Hazme perder la cuenta... De tanto placer... Dame de beber de mi en ti... Dame de beber cada gota de ti a la vez que extraes de mi cada cálida gota de deseo, de placer hecho suspiro en tu piel...
Hazme sentir como te deshaces de placer por mi, en mi... Igual que tú me sientes en ti... Entregado a lo que tú, solo tú me provocas... Entregado a provocarte más de lo que eres capaz de imaginar...
Solo tú, eres capaz... Solo en ti, soy capaz de sentir así... Tú eres mi placer... Tu placer, es mi placer... Mi sed y mi deseo de tenerte, no cesan, no se calman, no tienen límites... Y perdido en mi, te deseo... Entregada... Líquida... Derretida... Hasta incluso, desmayar sobre mi piel...
Te deseo... Deseo tu deseo de mi... Siempre...